miércoles, 9 de septiembre de 2009

Insurrección francesa anti-Sarkozy


El poder de los libros siempre ha asustado a los poderosos. Y desde que el presidente francés Nicolas Sarkozy maldijera públicamente el clásico libro de Madame de Lafayette, las ventas se han disparado y su fuerza frente al poderoso, ha aumentado. No sé si alabar la acción o aplaudir también a los departamentos de márketing de las editoriales que han vuelto a sacar el clásico de sus almacenes. En Francia siempre parece que nos llevan cierta ventaja cultural, y que se inicie una campaña de este tipo con la lectura de un clásico, sí que es una muestra de su elegancia natural. De momento el libro sigue formando parte del recorrido de lecturas habitual en las escuelas e institutos, pese a que el presidente, ni corto ni perezoso (pues para lo primero gasta tacones a lo Raphael, y para lo segundo hace footing a la hora de la siesta hispana), quiere eliminarlo por "peligroso" (en realidad dijo que por pesado, enrevesado y poco útil para la juventud francesa, oh la lá).



Lo curioso es que se ha acompañado al aumento de las ventas, la distribución de unos "pins" con el lema "Yo leo la Princesa de Clèves", que me recuerda levemente a esas camisetas valencianas del "Rita, ¿el papa sabe lo tuyo?". Las chapas están en todas partes, incluso en algún cajón de la mesilla de Carla Bruni. Ambos agotan cada tirada que sale al mercado y a la calle.



3 comentarios:

  1. Tengo unas ganas locas de leer este libro...Aunque... ver si va a ser q el Sarkozy tiene un contrato con las tiendas de libros...jajaja

    ResponderEliminar
  2. Je n'ai pas compris tout ce que tu dis mais je suis surprise de voir que La Princesse se vend partout dans toutes les librairies...... ce livre est particulière ennuyeux et je garde le souvenir du film réalisé au début des années 60 avec Jean Marais et la sublime Marina Vlady au zénith de sa beauté.
    Je signe Kay-Harpa parce que je ne sais pas bien comment m'inscrire sur ton blog.

    ResponderEliminar
  3. Muchas gracias, Kay-Harpa, por tu comentario, y por tu referencia a la película de Marina Vlady.

    ¿Cómo localizarte? Esa es mi duda.

    ResponderEliminar