(Extraído, o más bien robado, del cuaderno de notas del Profesor Galimatías Prats, allá por el año 2001)
...Para los latinos, la semana comienza el lunes, mientras que lo es en domingo para los anglosajones. Es ya una marca de carácter. Los latinos comenzamos la semana trabajando, solo pensando en los días de fiesta (días, porque ahora también lo son los sábados y pronto lo serán los viernes); en cambio, los del norte festejan que van a trabajar el resto de la semana. Quizás por eso ellos van siempre por delante, económicamente hablando; quizás por eso triunfó en el sur la idea católica del Paraíso: Sufrir un tiempo las penurias de la tierra solo pensando en la recompensa final: No pegar ni golpe (eternamente).
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